El Congresista puertorriqueño denunció ante el Congreso de Estados Unidos -esta mañana 14 de abril- el proyecto del gasoducto que promueve el gobierno de Puerto Rico.
Jueves 14 de abril 2011 - El congresista puertorriqueño Luis V. Gutiérrez ofreció un mensaje esta mañana en el hemiciclo de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, en el que denunció las acciones del gobierno de Puerto Rico con el proyecto del gasoducto y reveló que solicitó que el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos “que niegue la solicitud de permiso al gasoducto hasta que testifiquen expertos, se soliciten permisos, se celebren reuniones con las comunidades y se hagan estudios de impacto ambiental.”
Tras puntualizar las contradicciones que ha tenido Luis Fortuño sobre los gasoductos desde su posición de candidato y de Gobernador, Gutiérrez relató todas las acciones que ha tomado el gobierno para continuar el proyecto, evitar la fiscalización y transparencia y beneficiar a amigos del Gobernador con contratos millonarios.
A continuación, el discurso íntegro del Congresista Gutiérrez, en traducción de CLARIDAD:
Discurso del Congresista Luis V. Gutiérrez en el hemiciclo de la Cámara de Representantes de Estados Unidos
Jueves, 14 de abril de 2011
Sr. Presidente, tomo la palabra hoy para hablar otra vez sobre Puerto Rico, pero en esta ocasión es un poco diferente.
Tomo la palabra para significar que el gobernador de Puerto Rico Luis Fortuño, ha dicho algo con lo cual puedo coincidir.
Hablando sobre un propuesto gasoducto, el Gobernador Republicano dijo:
“No podemos continuar dependiendo de combustibles fósiles. El Gasoducto es combustibles fósiles.”
Él continuó diciendo que “amarrarnos a gas natural por 30 años sería un grave error.”
Él se estaba refiriendo a la construcción de una tubería de gas natural en una isla donde las hermosas playas, montañas y bosques tropicales son recursos naturales irremplazables y parte del motor económico que mueve el turismo – un gasoducto que suena como una propuesta dudosa.
Y estoy de acuerdo.
El Sr. Fortuño dijo estas palabras hace dos años, como candidato, criticando a su oponente.
Tristemente, ahora que está muy seguro en su cargo, el gobernador Fortuño ha cambiado de opinión.
Ahora, él entusiastamente apoya no sólo los gasoductos, sino uno mucho más grande, costoso y ambientalmente perjudicial.
Y cómo se está manejando la construcción de este gasoducto gigantesco, supergrande, es otra razón por la cual debo hablar –nuevamente— sobre la crisis de derechos civiles en Puerto Rico.
El partido de gobierno preferiría que el pueblo no se diera cuenta de que el Señor Fortuño y el Gobernador Fortuño tienen posiciones opuestas sobre los gasoductos.
Así que están trabajando intensamente para mover adelante este proyecto bajo el manto de la noche.
Todos los días, el partido de gobierno contesta esta pregunta:
Si usted quiere emprender un proyecto potencialmente peligroso, económicamente dudoso, ambientalmente desastroso y extremadamente impopular, ¿cómo lo haría?
Esta es la respuesta del partido de gobierno:
Le das la vuelta a los estudios de viabilidad.
Evitas los estudios de impacto ambiental.
Ignoras los procedimientos estándares de permisos y licencias.
Y haces todo lo posible por eliminar vistas públicas y escrutinio público.
¿Pero cómo continúas sin estas necesarias salvaguardas e información?
Si eres el gobierno de Puerto Rico y quieres construir un gasoducto de 92 millas sobre las montañas, a través de bosques, lagos y ríos y de críticos sistemas acuíferos subterráneos en Puerto Rico, enmiendas una ley diseñada para enfrentar desastres naturales para poder evadir los procesos normales públicos y de permisos.
Lo que ese partido de gobierno hace es declarar una “emergencia energética.”
La “emergencia energética” de este gobierno permite continuar con el gasoducto– a pesar de advertencias del Sierra Club, el grupo ambientalista Casa Pueblo y hasta del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos.
A pesar de preocupaciones de residentes de que será construido cerca de escuelas, iglesias y áreas residenciales.
A pesar de geólogos que indican que está cerca de fallas geológicas y que ha habido 2,500 eventos sísmicos en los últimos 3 años y uno que se sintió en toda la Isla hace sólo dos días.
La autoproclamada “emergencia energética” también ayuda a ocultar el hecho de que le has dado un contrato de diez millones de dólares a un amigo del Gobernador que no tiene experiencia alguna en la construcción de gasoductos.
Sí tiene, sin embargo, experiencia esquiando con el Gobernador.
Y quizás por eso es que puedes correr una campaña de relaciones públicas, pagada con fondos públicos, que renombra el proyecto “La Vía Verde”.
Así que en lugar de hablar de enormes costos financieros, humanos y ambientales, - esta campaña publicitaria Orwelliana llama “vía verde” un gasoducto que va sobre las montañas y atraviesa los bosques.
Como muchas personas, yo creo que mejor sería llamarlo “Adiós verde”, un limpiador mágico que usted aplica a sus bosques, ríos y lagos, para hacerlos desaparecer…, junto a millones de dólares de los contribuyentes.
He aquí un nombre más honesto para el proyecto: “la vía equivocada”.
Porque es equivocado gastar los dineros del pueblo en un proyecto que no quiere y que no ha sido estudiado apropiadamente, como el periódico El Nuevo Día ha demostrado en una serie de reportajes.
El candidato Fortuño tenía razón. El gobernador Fortuño está equivocado.
Es hora de arrojar alguna luz en este asunto. He enviado solicitudes al amparo de la Ley de Libertad de Información a todas y cada una de las agencias federales que han entendido en el proyecto del gasoducto. Haré públicos los resultados para que el pueblo sepa con quién se está reuniendo su gobierno, qué documentos existen y qué estudios se han hecho para demostrar la necesidad de este proyecto.
Más aún, ya le he solicitado al Cuerpo de Ingenieros del Ejército que niegue la solicitud de permiso al gasoducto hasta que testifiquen expertos, se soliciten permisos, se celebren reuniones con las comunidades y se hagan estudios de impacto ambiental.
Quizás el gobierno pueda justificar el proyecto a la luz del día. Pero no debe estar pidiendo el endoso sin antes presentarle los hechos al pueblo.
Es hora de dejar de hacer las cosas a la “Vía Verde” y empezar a hacerlas correctamente.
El 1 de mayo, todos a Adjuntas.
Foto por: Alina Luciano / Claridad |