Managua, 21 feb (PL) Los nicaragüenses homenajearon al General de Hombres Libres, Augusto C. Sandino, y destacaron su legado, al conmemorarse hoy 82 años de su asesinato.

Como parte del tributo a quien inspiró décadas después al movimiento insurreccional que derrocó a la dictadura de la familia Somoza, diputados a la Asamblea Nacional colocaron ofrendas florales ante monumentos erigidos al héroe en la avenida peatonal que lleva su nombre y la Plaza de la Revolución.

En las calles de Managua, mientras tanto, jóvenes, ancianos, representantes de las comunidades y organizaciones de base del Frente Sandinista de Liberación Nacional protagonizaron caminatas distritales en el contexto de la fecha.

Los homenajes se sucedieron también en el resto del país, con actividades culturales, desfiles y otras manifestaciones en honor al prócer realizadas en departamentos como León (occidente), Estelí y Jinotega (norte) y Carazo (sur).

Ayer, en un acto celebrado ante la casa familiar del héroe, en el pueblo de Niquinohomo, el presidente Daniel Ortega afirmó que Sandino murió por la paz de este país centroamericano.

Le podemos decir al general Sandino que seguimos dando la batalla por asegurar la paz por la cual él luchó, cuando bajó de la montaña a negociar con el presidente (Juan Bautista Sacasa), enfatizó al referirse al momento previo a su asesinato, la noche del 21 de febrero de 1934.

Recordó que el Héroe de las Segovias ya había derrotado a las fuerzas intervencionistas estadounidenses y en ese momento discutía las bases para la inserción del Ejército Defensor de la Soberanía Nacional en la realidad económico-social de la Nicaragua de entonces.

El jefe de Estado se refirió al nuevo ciclo histórico iniciado en 2007 con el regreso del sandinismo al poder como un proceso de construcción de la unidad entre los nicaragüenses, a partir del principio de la reconciliación.

Con la gran fuerza que nos da la unidad y el entendimiento entre todos vamos avanzando, aseveró.

Resaltó los logros de la nación en el combate a la pobreza, en la generación de empleo, la atracción de inversiones y en la cobertura escolar y universitaria, "a pesar de las enormes limitaciones de un país pobre, pero con dignidad".