16 de nov. de 2014 - Una vigilia convocada por distintas organizaciones ambientales y grupos comunitarios en oposición a la construcción de incineradoras en Arecibo y Barceloneta, se llevará a cabo a partir de este lunes frente a La Fortaleza y se extenderá hasta las 12:00 del mediodía del martes, según se informó.

La actividad, denominada “Vigilia por el aire limpio”, tiene como objetivo persuadir al gobernador Alejandro García Padilla para que impida la concesión de permisos de construcción de la incineradora ya que, a su entender, no solo afectaría el área de Arecibo y Barceloneta sino que su impacto se extendería a casi todo Puerto Rico.

“Nosotros tenemos una carta para el gobernador pidiéndole el cese y desista de esta masacre ambiental, estamos legítimamente preocupados por la salud de nuestro país”, dijo en entrevista telefónica hoy, domingo, una de las manifestantes, Lucila Oliver.

Oliver, de 44 años y vecina de Arecibo, dijo que al menos 200 personas le han expresado que participarán de la vigilia y unas 2,000 han firmado una petición en línea en contra del proyecto porque se ha entendido que una de esas plantas puede afectar la mayor parte del país por la extensión territorial de Puerto Rico. “Tenemos apoyo de toda la isla”, indicó.

Algunos grupos ambientalistas que han apoyado la actividad incluyen a Ciudadanos en Defensa del Ambiente, Comité de Defensa de la Poza, Sierra Club, Basura Cero, Madres de Negro, el Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico, Federación de Maestros, Movimiento Independentista Nacional Hostosiano, Movimiento Unión Soberanistas, Concilio de Iglesias Evangélicas, Sociedad Puertorriqueña de Trabajadores, Comisión Quinto Centenario de Arecibo 2015 y residentes del área de Arecibo, según se informó en comunicado de prensa.

Según han denunciado los distintos grupos que se oponen a su construcción, la incineradora quemaría unas 2,100 toneladas de residuos domésticos diariamente. Emitirían al aire sustancias como dioxinas y furanos y metales pesados, incluyendo plomo, en un área que ya ha sido declarada como contaminada con plomo por la EPA. Sus detractores temen, además, la producción de cenizas toxicas que dependen de un vertedero para ser descartadas, a pesar de que los que favorecen su existencia aseguran que terminaría con el problema de vertederos que existe en Puerto Rico.

Asimismo, Oliver advirtió que, además de Arecibo y Barceloneta, existen sectores que impulsan la construcción de otras plantas en Moca y Vega Alta.