(San Juan, 11 de julio 2011). El copresidente del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano, Dr. Héctor L. Pesquera, propuso un plan de cuatro pasos para evitar el colapso del Plan Gubernamental de Salud (PGS).
“Nadie desea que el sistema de salud público siga el curso de deterioro progresivo en que se encuentra y su eventual colapso. Con la intención de contribuir a detener el colapso del único servicio de salud que tiene el sector más necesitado de nuestro pueblo, proponemos al Gobernador Luis Fortuño y al Secretario de Salud, Dr. Lorenzo González, el siguiente plan de cuatro pasos:
Primero: Que de inmediato el Gobierno le garantice a los proveedores el pago por servicios prestados, de acuerdo a lo contratado con la compañía MCS.
Segundo: Que se utilicen los próximos 90 días de “transición” para estructurar una Oficina Gubernamental de Pagador Único, para tramitar facturas y el pago directo a los proveedores del Plan de Salud Gubernamental, eliminando la aseguradora como intermediaria de la región que antes operaba bajo MCS.
Tercero: Que durante los siguientes seis meses, el Gobierno y las agencias pertinentes preparen toda la infraestructura necesaria para asumir, como pagador directo, la totalidad de los servicios en la isla, sustituyendo a Humana en cuanto a salud física y a APS en la administración de la salud mental.
Cuarto: Que se le de curso de inmediato a los estudios y ajustes necesarios para estructurar y operar un Sistema de Salud Universal en Puerto Rico, que integre y armonice la multiplicidad de sistemas existentes, como lo han hecho los países más adelantados del mundo en materia de salud.
“El reclamo por un cambio radical en la prestación de servicios de salud en Puerto Rico es multisectorial, amplio y contundente. No se trata de falta de dinero. Según el Colegio de Contadores Públicos Autorizados, el Puerto Rico se gastan sobre $11,000 millones cada año en servicios de salud, en términos proporcionales más que lo que gastan Francia o España, países con sistemas de salud universal de la más alta calidad”, aseguró Pesquera.
“La crisis y deterioro del modelo existente nos presenta un reto y nos ofrece una gran oportunidad para impulsar un cambio verdaderamente cualitativo en la salud pública puertorriqueña y en la defensa de la salud como un derecho humano fundamental, no como un privilegio de los que tienen con qué pagar. No hay espacios para más parches. Es momento del cambio”. |