Los organizadores del seminario internacional América en disputa, con sede en Bolivia, denunciaron que el líder independentista boricua Oscar López Rivera ha sido detenido en el aeropuerto de Panamá mientras viajaba al país sudamericano y será deportado a Puerto Rico este martes.

Según la declaración, López Rivera se dirigía hacia Bolivia para participar en el encuentro que se celebra desde hoy en la ciudad de Santa Cruz, y fue retenido en el aeropuerto panameño a pesar de tener su pasaporte habilitado y haber cumplido su condena política en cárceles de Estados Unidos.

Los organizadores del seminario internacional denuncian ante el mundo esta injusta y arbitraria medida y exigen la liberación inmediata de López Rivera, y que continúe viaje hacia la nación sudamericana, dijeron.

Auspiciado por la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad y otras instituciones, el foro reúne a intelectuales y pensadores de izquierda, quienes abordarán durante tres días las alternativas frente a la ofensiva neoliberal en la región.

Entre los panelistas invitados se encuentran, además del luchador puertorriqueño, personalidades como el expresidente hondureño Manuel Zelaya, el argentino Atilio Borón, el venezolano Wiliam Castillo y el ministro boliviano de Gobierno, Carlos Romero.

El programa destaca temas como el reflujo del cambio de época, ofensiva imperialista y alternativas desde las izquierdas. Como colofón, los organizadores prevén una masiva concentración antiimperialista en el coliseo Santa Rosita de la ciudad de Santa Cruz, donde se espera la proclamación del 9 de agosto como “Día internacional de condena a los crímenes estadounidenses contra la humanidad”.

El líder independentista boricua permaneció preso en Estados Unidos por 36 años, 12 de los cuales los cumplió en régimen de total aislamiento.

Fue acusado de conspiración por la justicia estadounidense en 1981, tras ser vinculado con las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional de Puerto Rico, organización que luchaba por la independencia de la isla caribeña.

Líderes de todo el mundo exigieron su liberación, y en 2012 el Comité de Descolonización de la Organización de las Naciones Unidas aprobó una resolución en la que pedía reconocer el derecho de Puerto Rico a la independencia e instaba a liberar a los independentistas prisioneros.

El 17 de enero de 2017 el entonces presidente de Estados Unidos Barack Obama, conmutó la sentencia de López Rivera y ordenó su liberación el 17 de mayo de ese año.