Escrito por Ricardo Santos Ramos
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Viernes, 26 de Enero de 2018 00:27 |
El pueblo de Puerto Rico vive una crisis que se complica ante la incapacidad administrativa del gobernador Ricardo Rosselló y su estilo abusivo que le falta a la verdad.
Un gobierno falto de sensibilidad conduce al pueblo a la miseria. Se aprovechan de la crisis creada por el paso de los huracanes Irma y María y del descalabro administrativo de la Autoridad de Energía Eléctrica, provocadas por los gobiernos de los partidos Popular Democrático y Nuevo Progresista.
El gobernador anuncia la privatización de la AEE como solución al problema. Le promete al pueblo, que por los pasados cuatro meses en un 50% carece del servicio de energía eléctrica, que la privatización les reducirá el costo de la tarifa y construirá un nuevo sistema eléctrico con nuevas plantas que no contaminen el ambiente, y una red de transmisión y distribución resiliente a los embates atmosféricos.
Nada más lejos de la verdad. El gobernador miente y abusa del sufrimiento del pueblo que vive desesperado ante la falta de energía eléctrica. Mientras, oculta quiénes están detrás del plan de privatización de la AEE.
Ciertamente la AEE necesita transformarse y extirpar de raíz todo funcionamiento politiquero. Para lograrlo no hay que privatizarla. La energía eléctrica no es una mercancía, es un bien de la sociedad que tiene que estar al alcance de todos. Si la privatizamos cambia su propósito social a uno de lucro privado.
Recordemos que fue el gobernador Rosselló quien nos prometió restablecer el servicio de energía eléctrica para el 15 de diciembre. Hoy pretende que creamos que con la privatización de la AEE se reducirá el costo de la luz. Nada más lejos de la verdad.
Se negó reiteradamente durante dos meses a solicitar ayuda de APPA para restablecer nuestro sistema eléctrico, con el único propósito de favorecer a Whitefish.
Apagó la planta de Palo Seco para justificar la privatización, negándose a prenderla durante tres meses, provocando inestabilidad en el servicio.
No permitió una respuesta rápida de los funcionarios de la Autoridad ante las mentiras del Cuerpo de Ingenieros de Estados Unidos sobre los alegados materiales encontrados en el Almacén 5 de Palo Seco.
No permitió la ayuda coordinada de los alcaldes, empleados jubilados de la Autoridad y peritos electricistas en los trabajos de reconstrucción del sistema eléctrico.
Nos informa que la AEE tiene que apagar las unidades del ciclo combinado de Aguirre y Cambalache por falta de dinero, cuando la realidad es que ésta es una operación normal de la Autoridad. Pero, en un acto insensible, juega con el sufrimiento del pueblo para adelantar su campaña de privatización. El mismo gobernador hoy nos dice que la Autoridad no sirve.
No, señor gobernador, quien nosirve es su gobierno. Puerto Rico está en crisis, la Autoridad también. Pero usted no tiene la más mínima posibilidad de sacarlo de la crisis porque ha demostrado una incapacidad administrativa agravada por una conducta de total menosprecio a la verdad. El engaño publicitario, la falta de sensibilidad y transparencia de su gobierno son herramientas que conducen al pueblo a la miseria.
Su gobierno no sirve. Tenemos que cambiarlo ya por el bien de todos y todas. Ofrezca al pueblo su mejor legado: renuncie. Permita que el pueblo de Puerto Rico escoja a una persona con la capacidad administrativa de gobernar, que goce del respeto del pueblo y de las autoridades federales que gobiernan a Puerto Rico y, sobre todo, que tenga el valor para enfrentar a cualquier enemigo externo o interno del país. Un Puerto Rico mejor es posible si sus gobernantes representan los intereses de todo el pueblo. (endi.com) |