“A ese tubo asesino, no lo quiero de vecino. ¡Palo Palo Palo para ese proyecto malo! Energía renovable para un futuro viable”, [...]
eran algunas consignas de decenas de manifestantes de diferentes sectores comunitarios, quienes censuraron ayer el proyecto del gasoducto frente al Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos, en Puerta de Tierra.
La seguridad era una de las preocupaciones en común de los ciudadanos que marcharon ayer.
Yolanda Cafiero, una de las portavoces de Comunidad Toabajeña en Defensa de la Zona Costera, y vecina de Levitown, dice que no es la primera vez que han tenido que defender la costa frente a su hogar.
En un pasado la comunidad tuvo que ir a los tribunales en repudio a un frente marítimo que se planificaba para esa zona de Toa Baja. Entonces, “nuestro grupo hizo el cambio”, dijo Cafiero.
Su vecina Carmen Alvarado, alertó que la comunidad de unas 180 familias, en el condominio Lago Playa, se vería afectada, pues el tubo pasaría a 80 metros del condominio.
Su inquietud es que, en caso de una emergencia, esa área de Toa Baja solo cuenta con una carretera de entrada y salida, y hasta el momento no tienen orientación de un plan de acción en caso de que ocurriera una emergencia.
Igualmente angustiadas están otras comunidades costeras que participaron en la protesta.
Ricardo Laureano, del Grupo Vidas: vegabajeños impulsando el desarrollo ambiental sustentable, denunció que ya hay fincas que han sido impactadas por el proyecto.
Según Laureano, se han tumbado verjas en fincas de Río Abajo en Vega Baja por donde caballos se han fugado, sin poder recuperalos. “Uno se tuvo que sacrificar cuando lo encontramos porque tenía una pata rota”, dijo.
Otros grupos comunitarios como Playas Pa'l Pueblo, Sierra Club y Casa Pueblo alzaron la voz durante la manifestación en la que portaron carteles en repudio a la llamada Vía Verde.
Arturo Massol, de Casa Pueblo, se solidarizó con la protesta.
Además, alertó acerca de campamentos de desobediencia civil que se están alzando en algunos puntos de la Isla.
Mientras, un joven, que prefirió no identificarse, invitó a los ciudadanos a ver Gasland, un documental que habla sobre el impacto ambiental que han tenido comunidades donde se ha perforado la tierra para obtener gas natural.
Algunos manifestantes aclararon que no se oponen al gas natural como una alternativa de transición hacia la energía renovable.
Sin embargo, entienden que detrás de el proyecto de la Vía Verde hay intereses económicos que arriesgan la calidad de vida de los ciudadanos y los ecosistemas puertorriqueños, incluidas la flora y fauna. |