Victoria es el nombre de cualquier joven universitaria militante, mujer sindicalista, puertorriqueña trabajadora o fémina solidaria que se ha unido al movimiento contra la imposición de la Junta de Control Fiscal y, con eso, ha visibilizado el rol de la mujer en la lucha y ha validado la trascendencia del legado histórico de antecesoras prominentes como Lolita Lebrón, Blanca Canales, Isabel Rosado y Luisa Capetillo.
Victoria, le denominan estas mujeres al logro de haber entorpecido, junto con los centenares de activistas de distintas uniones, organizaciones cívicas y movimientos políticos, el itinerario del 1st PROMESA Conference, actividad pautada para celebrarse ampliamente el pasado 31 de agosto en las instalaciones del hotel Condado Plaza en la avenida Ashford.
Victoria es sinónimo del efecto que tuvo la presencia y resistencia del pueblo ante el poder que tienen muchos de los que fueron invitados a esa conferencia, organizada para los interesados en respaldar la Ley PROMESA y la Junta de Control Fiscal, medidas diseñadas para, supuestamente, combatir la inestabilidad fiscal por la que atraviesa el País y supervisar el presupuesto del pueblo de Puerto Rico. Sin embargo, la realidad de esta injusta imposición es que afectará a los puertorriqueños de muchas maneras y que viene a enriquecer a unos poquitos. Tal como argumentó en entrevista para CLARIDAD Raquela Delgado Valentín, activista feminista y trabajadora social, “eso lo podemos ver en quienes fueron nombrados como miembros, personas que han estado vinculadas a los partidos políticos, que han mantenido el poder, que han llevado a Puerto Rico a la deuda actual, y que vienen a empobrecer al pueblo trabajador de este País y a llenarles los bolsillos a los bonitas, a los buitres y a los buscones”.
Más allá del forcejeo entre activistas y oficiales de la unidad de Operaciones Tácticas y demás incidentes ocurridos en las inmediaciones del hotel Condado Plaza, la protesta “fue victoriosa porque, de ahora en adelante lo que queremos es que la Junta y todos los que estén relacionados con cómo se va a reestructurar el País, sepan que va a haber presencia de nosotras y nosotros en la calle y que estamos con un carácter combativo y organizado”, comentó Marisel Robles Gutiérrez, parte del colectivo “Jornada: se acabaron las promesas”.
Además de ofrecer declaraciones sobre la manifestación del pasado miércoles 31 y sobre la Junta de Control Fiscal, Delgado Valentín, Robles Gutiérrez y otras dos mujeres militantes de diferentes generaciones comentaron a CLARIDAD sus opiniones acerca del rol que tiene el género femenino dentro de la lucha social y política. A continuación, las cuatro entrevistadas contestaron, por ejemplo, qué aporta a la lucha social el que las mujeres estén tomando liderazgo, y qué ha posibilitado el aumento de las mujeres en las luchas.
Lucha: herramienta contra la invisibilización
Otra de las victorias que aflora de las diferentes manifestaciones contra la Junta de Control Fiscal – y de otras luchas – es la unidad que forman varios sectores del pueblo con el interés de utilizarla como herramienta para exterminar la invisibilización a la que el coloniaje nos ha sometido a todos los puertorriqueños. A juzgar por el escritor Eduardo Lalo, “la invisibilidad es un mecanismo de dominio que hace que ciertas cosas se vean mucho y que otras, se vean de manera muy limitada”.
Definitivamente, en la medida en que las mujeres continúen el legado de otras que dieron batallas sociales, van impulsando la erradicación de la invisibilidad femenina dentro de una sociedad patriarcal que domina a este sector y que, además, históricamente ha estado sometida al colonialismo.
El que las mujeres se inserten en la lucha social y política de un país colonizado como Puerto Rico refleja un doble intento de visibilización: denunciar el colonialismo y empoderarse dentro de una sociedad hegemónico patriarcal.
Bien lo expresó Marisel Robles Gutiérrez: “desde lo macro, la Junta es una estructura que viene a imponerse sobre nosotros y, a las mujeres – por ser grupo minoritario – la imposición de impuestos nos afectará aún más [...] Poder romper esquemas sociales desde la lucha en la calle, visibiliza las necesidades, los roles de la mujer en esta sociedad. Desde la línea de piquete, la presencia femenina quiere enviar el mensaje no solo del problema que enfrentaríamos en Puerto Rico con la imposición de la Junta, sino cómo afecta a las mujeres en sus roles de madres…”.
Robles Gutiérrez testimonió para finalizar: “para mí, entrar a la lucha o al activismo fue encontrar un espacio donde sí hay compañeros y compañeras feministas que están problematizando todo el tiempo cómo nosotras nos desenvolvemos, cómo asumimos liderato en estos espacios. El activismo busca constantemente que las mujeres asumamos otros roles que no naturalizaron en nuestra crianza”.
Asimismo, estar insertada en la lucha es querer visibilizar otros roles de las mujeres. Michel Collado Toro, otra de las militantes entrevistadas, aseveró que, “en gran medida, las mujeres hemos decidido tomar acción en el plano político porque muchas veces somos las que cogemos los palos más duros. Somos muchas veces las cuidadoras, las que asumimos el cuidado de los hijos, de la familia. Entonces, a la par con esa responsabilidad, también nos tocan los palos que ofrece un sistema que cada día nos quita más posibilidades de desarrollarnos o de lograr algo en la vida”.
En definitiva, la última entrevistada, Ana Irma Rivera Lassen, desde su perspectiva de mujer activista y de otras identidades que se autoreconoce, afirmó que fue victoriosa la protesta en contra de la realización del 1st PROMESA Conference porque “logró a lo largo del día, desde la mañana hasta la tarde, incorporar una diversidad de personas y entidades que dieron un mensaje contundente dentro y fuera de Puerto Rico, de rechazo a la Junta”.
“Lo que hará fuerte la lucha que tenemos por delante, y que apenas empieza, es reconocer la diversidad de voces y de estilos de trabajo”. De igual forma, “lo que dará más fuerza a los liderazgos de mujeres y a cualquier otro liderazgo que desafíe entendidos binarios hombre-mujer o lo que se entienda por femenino y masculino, será la bandera de no aceptar violencia de género en las distintas organizaciones o grupos”, puntualizó Rivera Lassen, quien funge como miembro de la Concertación contra la Junta de Control Fiscal Federal y del Movimiento Amplio de Mujeres de Puerto Rico.
Dentro de la lucha contra la Junta de Control Fiscal, como es evidente, se continúan desarrollando otras muchas luchas que se extienden pese a las victorias que se van alcanzando en el camino: las de las mujeres contra una sociedad patriarcal y la de todos los puertorriqueños y puertorriqueñas contra el coloniaje que nos arropa.
Rechazo al 1st Promesa Conference
Las inmediaciones del Hotel Condado Plaza amanecieron la mañana del 31 de agosto con decenas de manifestantes que se iban uniendo en una sola voz con el propósito de detener la realización de las actividades concernientes al 1st PROMESA Conference, la cual estaba pautada para celebrarse en las instalaciones de mencionada hospedería. Entrada la mañana, ya figuraban centenares de activistas de distintos sindicatos, organizaciones cívicas y movimientos políticos conglomerados en respuesta a la convocatoria masiva ‘Se acabaron las promesas’, realizada hace semanas por el colectivo Jornada.
En un acto violento, cerca de la 1:00 de la tarde, oficiales de Operaciones Tácticas arremetieron contra los activistas que estaban ejerciendo el derecho a la libre expresión. Sin embargo, más allá del forcejeo entre activistas y miembros de la uniformada, de los afectados con gas pimienta, de los tres manifestantes arrestados, de la orden tipo injuction (con particularidades de cese y desista) que impuso la Cámara de Comercio de Puerto Rico contra Joselyn Vázquez y demás manifestantes, la conferencia no se efectuó como se esperaba, por lo que surtió efecto la presencia y resistencia del sector civil.
Esta protesta en contra de la Junta de Control Fiscal o PROMESA (siglas para el título del proyecto de ley Puerto Rico Oversight Management and Economic Act) se unió a otras realizadas las pasadas semanas en las instalaciones de la firma financiera UBS en Hato Rey, en la sede del Banco Popular en el Viejo San Juan y en las inmediaciones del grupo mediático GFR Media. Además, se añadió al Campamento Contra la Junta que mantienen hace varios meses decenas de activistas (jóvenes en su mayoría) en las afueras de la Corte Federal, localizada en la calle Chardón de Hato Rey.
Los convocados a la manifestación expresaron que continuarán en lucha y resistencia hasta lograr erradicar esa ley federal diseñada por el Congreso de los Estados Unidos para, supuestamente, combatir la inestabilidad fiscal por la que atraviesa el País y supervisar el presupuesto del pueblo de Puerto Rico.
Fuente: Claridad
Foto: Luis López / MINH |