Cancilleres y altos funcionarios de la región dieron en esta capital pasos sólidos para el nacimiento en julio próximo de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), al aprobar procedimientos y acciones de cara a su fundación.


En la reunión realizada este martes en Venezuela, delegados de 30 países aprobaron un borrador que propone la estructura, los mecanismos de toma de decisiones, las convocatorias a sesiones y la definición de la presidencia temporal del bloque integracionista genuinamente regional, al no incluir a Estados Unidos y Canadá.

Además de ese documento, acordaron un plazo de 30 días para analizar y consultar una declaración en defensa de la democracia y el orden constitucional de las naciones miembro.

La iniciativa busca proteger a Latinoamérica y el Caribe de golpes de Estado y desestabilizaciones como las ocurridas en los últimos años contra los gobiernos legítimos de Bolivia, Ecuador, Honduras y Venezuela.

Para el presidente anfitrión, Hugo Chávez, la Celac y sus instrumentos, entre ellos la llamada cláusula democrática, representan la oportunidad de convertir la región en una zona de paz y unidad.

"Tenemos que consolidarnos como un territorio de paz e integración, sin más guerras, golpes de Estado y violencia; para desde aquí ayudar al equilibrio del planeta", señaló al intervenir en la instalación del encuentro realizado en el hotel Meliá Caracas.

Durante el foro, los cancilleres y funcionarios fijaron el cronograma a seguir en las próximas semanas para garantizar el éxito de la cumbre fundacional de la Celac, prevista el 5 y 6 de julio en Caracas, coincidiendo con el bicentenario de la declaratoria de independencia de Venezuela.

Según informó el canciller Nicolás Maduro al concluir la reunión, Caracas será sede de intercambios ministeriales sobre cambio climático (28 y 29 de abril), energía (12 y 13 de mayo) y economía, finanzas y comercio (18 y 19 de mayo).

Esos encuentros complementarán el desarrollado aquí sobre cuestiones sociales, para dar forma al documento político contentivo de las doctrinas y principios del naciente bloque, explicó a Prensa Latina.

De acuerdo con Maduro, el 2 de junio los países enrolados en el proyecto de integración regional revisarán todo el camino avanzado y los textos perfilados.

Resumiendo -precisó- a la cumbre fundacional de julio nuestros jefes de Estado y Gobierno llegarán con los procedimientos, la declaración de defensa de la democracia y el documento político derivado de las reuniones ministeriales.

El foro además sirvió para discutir la situación de Honduras, donde un golpe de Estado rompió en junio de 2009 el hilo constitucional en ese país centroamericano.

Al respecto, los representantes respaldaron las gestiones de Venezuela y Colombia para propiciar un acercamiento nacional que restaure el orden, permita el regreso de Manuel Zelaya -depuesto y exiliado por la asonada- y reincorpore a Tegucigalpa a la comunidad internacional.

También acordaron un plazo de 24 horas para revisar el conflicto de Libia, donde los sistemáticos bombardeos de Estados Unidos y aliados europeos complican el escenario político, social y económico del país norafricano.

En ese sentido el canciller venezolano manifestó la esperanza de impulsar desde Latinoamérica y el Caribe una salida pacífica a la crisis.

Hay una propuesta de resolución sobre la cual nos dimos 24 horas para consultarla. Varios gobiernos coincidimos en la necesidad de romper allí el escenario de guerra impuesto, y establecer la paz, poniendo fin a la barbarie contra el pueblo libio, apuntó.

Participaron en el encuentro delegaciones de Antigua y Barbuda, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Dominica, Ecuador, El Salvador, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras.

Tambien de Jamaica, Nicaragua, México, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Surinam, Trinidad y Tobago, Uruguay y Venezuela.