El miércoles 5 de junio de 2013  se celebró la Centésima Octava Colación de Grados de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. Esta graduación estuvo matizada por varios eventos como las renuncias de Miguel Muñoz y Ana Guadalupe; la exigencia de una amnistía a los estudiantes expulsados Waldemiro Vélez, Ibrahim García y Rafael Ojeda, además de la exigencia de la excarcelación y libertad de Oscar López Rivera.

La Centésima Octava Colación de Grados de la Universidad de Puerto Rico,  Recinto de Río Piedras comenzó con uno de los triunfos del estudiantado: haber tenido una graduación sin aquellos actores que le hicieron tanto daño a la universidad, Miguel Muñoz y Ana Guadalupe.

Álvaro Moreno, presidente del Consejo General puntualizó que la universidad y los universitarios hoy, tienen el gran reto de llevar al recinto a su máximo potencial.

Además, le envió un mensaje claro a la nueva Junta de Gobierno de que no repitan los estilos de la pasada Junta de Síndicos por el mejor bienestar de la educación pública. Puntualizó que la universidad no debe estar sujeta al vaivén político-partidista y que la universidad es de los universitarios y del pueblo puertorriqueño.

Asimismo, le exigió a la Junta de Gobierno una amnistía a los estudiantes expulsados arbitrariamente por la pasada administración universitaria. Además indicó, que esta graduación hubiese sido la de alguno de ellos.

El estudiante expulsado Waldemiro Vélez estuvo presente Octava Colación de Grados de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, aunque no sabemos si era uno de los estudiantes que se graduaría.

Por otro lado, más de una decena de estudiantes llevaron al acto de graduación su reclamo a la excarcelación y libertad de Oscar López Rivera.

Los graduados llevaron su protesta sobre el birrete. Los birretes se convirtieron en la expresión pacífica a ese llamado de indulto al presidente Obama.

“Oscar lleva 32 años encarcelado  por amar a su patria y es hora ya que esté en casa”, así se expresó Jennifer Oliveras quien se graduó de Trabajo Social y es miembro de la Juventud Hostosiana.

A preguntas de quien suscribe esta nota, la joven añadió “que Oscar es un ejemplo; que cuando creemos en algo tenemos que luchar por ello sin importar las consecuencias. Oscar está encarcelado injustamente. Si los Estados Unidos dicen llamarse los defensores de los derechos humanos, es hora ya que Oscar regrese a su Patria Puerto Rico”, concluyó.