En los pasados meses hemos visto con horror e impotencia cómo el estado sionista de Israel ha perpetrado uno de los actos de genocidio más espeluznante ante las miradas impávidas y los oídos sordos del autodenominado “mundo libre”, autoproclamados paladines de la “democracia”, los “derechos humanos” y la “libertad”.
Menuda forma de defender la democracia, los derechos humanos y la libertad, como lo han hecho en Afganistán, Libia, Irak y Siria. Estados Unidos (EEUU) y sus socios de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y la Unión Europea deciden quién merece gobernar un país y si no es de su agrado, entonces “salvan” al esclavizado pueblo bombardeándolo, financiando y armando grupos mercenarios terroristas, destruyendo su infraestructura y ocupando su territorio con tropas de EEUU. Como sabemos, una vez entran las tropas de EEUU a “salvar” un pueblo, no hay forma de que se retiren porque siempre habrá una excusa para volver. Sobre todo si el país cuenta con cuantiosos recursos de petróleo o gas, o es un enclave importante en los intereses geopolíticos estadounidenses.
Israel es el enclave geopolítico más importante que tiene EEUU en el Oriente Medio. Por eso no importa que se convierta en un estado fascista y genocida siempre que garantice los intereses de EEUU. A pesar de la alarma internacional ante el genocidio continuo que perpetra Israel contra el pueblo palestino, no habrá nunca la posibilidad de que el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) apruebe sanciones contra Israel por el poder de veto de EEUU. Contrástense las acciones genocidas de Israel contra Palestina con la supuesta tenencia de armas de destrucción masiva de Irak, que luego fuera comprobada como una fabricación de EEUU, para justificar la agresión contra el gobierno de Saddam Hussein. La hipocresía del gobierno de EEUU no puede ser más burda.
Muerte, destrucción, represión, genocidio, ha sido la política de Israel hacia Palestina. Sin embargo, hay quienes aún al día de hoy la justifican. Para los que aún encuentran alguna justificación para los actos de Israel, sólo les pido que reflexionen sobre estas preguntas:
¿Quiénes han sido históricamente responsables de los progroms y el holocausto contra los que profesan la religión judía?
¿Por qué Palestina se llama Palestina?
¿Quiénes tomaron la decisión de entregarles a los sionistas las tierras de Palestina para crear el estado de Israel?
¿Admite el sionismo la existencia de un estado palestino?
¿Quiénes han incumplido las resoluciones de la ONU y los Acuerdos de Camp David?
¿Quiénes han ocupado por la fuerza de forma ilegal los territorios reconocidos por la comunidad internacional como territorios palestinos?
¿Justificaba el alegado secuestro y asesinato de tres jóvenes israelíes (que al día de hoy no se han identificado responsables) que se desatara una guerra de exterminio contra el pueblo gazatí palestino?
Después de cincuenta días de ataque feroz contra la Franja de Gaza los resultados, o “daños colaterales” como le llamarán los sionistas y sus colaboradores, no pueden ser menos horríficos: 2,140 palestinos muertos, de los cuales cerca de 500 eran niños, 400 combatientes palestinos y el resto mujeres, ancianos y hombres civiles; el desplazamiento de 46.000 palestinos que viven hacinados en centros de refugio y escuelas; daños en más de 50,000 viviendas que incluye casi 9,000 hogares destruidos por completo y otros 7,900 con daños estructurales que los hacen inhabitables y que dejan sin vivienda a más de 100,000 de los 450,000 desplazados internos, además de daños en alrededor de 200 escuelas, 33 hospitales y clínicas de ese territorio.
A esto hay que sumarle la destrucción del sistema pluvial, de comunicaciones y eléctrico, con las consecuencias en la salud y calidad de vida que ello ocasiona. A la destrucción de su infraestructura hay que sumarle la destrucción de su economía y su organización social. En resumen, hace falta de todo y lo más básico para la vida humana. No olvidemos que Gaza enfrenta su tercera reconstrucción en seis años como resultado de los ataques de Israel.
Con el acuerdo del alto al fuego permanente alcanzado por Israel y los representantes del pueblo palestino, se crean las condiciones para ayudar al pueblo palestino en la Franja de Gaza en su recuperación y reconstrucción. El jefe de la delegación palestina en El Cairo, Azam al Ahmed, informó de la “apertura de pasos por motivos humanitarios, para (la entrada) de víveres, material médico y todo lo que permitirá reparar los sistemas de agua, electricidad y de telefonía móvil”.
El miércoles comenzó a llegar ayuda de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA, por sus siglas en inglés) y por primera vez desde 2007 un convoy con ayuda humanitaria del Programa Mundial de Alimentos (PAM) ingresó en la Franja de Gaza, con alimentos para satisfacer las necesidades de unas 150 mil personas durante cinco días. Llegaron, además, más de 200 toneladas de ayuda humanitaria de Arabia Saudita, Omán y Turquía. Ecuador y Venezuela aportan ayuda humanitaria diversa, entre ella, Venezuela acogerá a 200 niños palestinos para ser adoptados.
En Puerto Rico, el Movimiento Independentista Nacional Hostosiano (MINH) anuncia el inicio de una campaña nacional denominada “Puerto Rico da la mano a los niños y niñas de Palestina”. Nos proponemos recaudar fondos para aportar a las necesidades vitales de miles de niños y niñas palestinos, que han sido víctimas principales de la agresión contra la población de Gaza. No habrá ayuda pequeña porque la necesidad es mucha.
A nuestro llamado ya han comenzado a sumarse sectores del pueblo de Puerto Rico. En Vieques ya se está organizando un grupo para la recaudación de fondos. Resulta simbólico que el pueblo de Vieques haya sido el primero en responder al llamado, porque si hay algún pueblo que conoce lo que es ser despojado de su tierra, obligado a vivir en una franja bajo un régimen de apartheid y a ser bombardeado y destruido, es el pueblo de Vieques. También se han sumado al llamado la Unión General de Trabajadores (UGT) y la Hermandad de Empleados Exentos No Docentes (HEEND).
Hacemos un llamado a las organizaciones profesionales, sindicatos, sociales y comunitarias a que se sumen a este esfuerzo. Para los que deseen aportar pueden hacer su aportación económica directamente depositando en la siguiente cuenta: Oriental Bank, ''Apoyo Niñez Palestina'' #3094545961. Para información adicional puede llamar al (787) 774-8585.
* La autora, abogada y Copresidenta del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano.
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